lunes, febrero 18, 2008

Algoritmos

[Publicado en la revista literaria "La Ballesta de Papel" en su número 3]


Y después de todo, parece no haber ocurrido nada. ¿Será?

Ya me arrastro entre lodos de ceniza, entre inertes muros de hojalata y umbrales que tras atravesarlos comprendo que ya es hora de vivir. Cavilo mientras mantengo candente la llama del conocimiento para comprender que estos sucesos que silban aún en mis oídos no son más que fruto de la impertinencia de la sinrazón.

—Gracias por abrirme la puerta.
—El placer es mío. Adelante. Siéntese --me dijo un señor de faz blanca como la cal mientras me mostraba un salón.
—Muy amable.
—¿Gusta del té y de dulces manjares?
—Por supuesto.
Al rato, la tetera avisó con un chirrido de que era el momento para vaciarle la panza ardiente. Colocó tres tazas en una bandeja de propaganda de refrescos --junto al paquete de azúcar apunto de terminarse y dos grandes barquillos de merengue-- para llevarlas al salón.
—¿Los aseos?
—Por ahí.
—No traje para ti porque no debes tomarlos. El azúcar ya no es bueno para ti. No me chilles. Debes aceptar tus defectos para ser más virtuosa. Él me obligó, ¿lo entiendes? Me agarró por el nudo de la corbata y me obligó. Acercó una voz que se deslizaba ronca por mis oídos. Está chiflado, míralo. Su camisa parece un mantel, sobre todo por la mancha rojiza que hay en su pecho. Me obligó a ser amable. Esto es de locos, ¿lo entiendes? No, no quiero... ¿lo entiendes? Dentro de poco vendrán —discutió mientras me ausentaba—. Sí es un timo, esto de la política es un timo. Deberían guiarse por el sentido común y no ahogarse en espesa dialéctica.
—Se acabó el papel higiénico, que tenido que limpiarme con una toalla.
—Esta es su casa, no importa, no importa. ¿Qué te dije? —cuchicheó acercándose a su esposa—. Parece cansado, ¿prefiere mejor una tilita?
—No es necesario. Me conformo con tirar esta taza al suelo.
—Iré a por la fregona —dijo pausadamente, y a la vuelva me miró con cara curiosa mientras secaba—. No intento ser impertinente, pero su camisa esta manchada... Le vendría bien un paseo por la lavadora. ¿Le gustaría que se la dejara limpia? Le prestaré una.
—Sabe, mi padre ha muerto.
—Lo siento. Le acompaño en el sentimiento —cambió su semblante.
—¿Cuánto?
—Mucho, supongo.
—¿Cómo? No conoce a mi padre, ni siquiera a mí.
—Bueno, tal vez no lo sienta tanto.
—¿Qué? Estoy destrozado. ¿Entiende? No sabe lo que significa esto para mí. Le he amenazado para que me invitase a esta merienda. Qué se comportara con naturalidad ¿Qué le pasa? Es así con todos lo que intentan abusar de cualquiera. Espabile.
—Era solo una forma d...
—No ha merecido la pena. Creía que irme al cosmos del vecino iba a servir de ayuda. Para respirar ante tantas leyes no escritas. No señora, me marcho. He dicho que me suelte. Señora, no me tire. No me muerda en la mano.
—No tenía opción, el cuchillo estaba afilado. Haz lo que te dice.
—Son los protocolos los que no me dejan vivir. No estoy gratamente sorprendido. Deseaba que no me trataseis tan cortésmente. Estoy intentado que me expulsen. Soy una visita molesta y no se les ocurre más que tratarme de buena manera. ¿Deben comportarse como está estipulado? No, esto no se hace así. Trátenme malamente —amenacé empuñando el cuchillo—. Insúltenme.
—¿Cuándo murió su padre?
—¿Qué insinúa? Esto es solo un poco de ketchup. Huela. Soy un desconocido. He venido en busca de evasión: mis problemas me asfixian. Venir aquí ha sido como una confortante copita de coñac. En esta casa no hay nada que me recuerde a lo que se me viene encima: es una nueva vida. Gracias por este segundo de placidez, me marcho. En el siguiente turno toca aguantar al psiquiatra.
—Huir no es la mejor forma de solucionar los problemas ¿Por qué?
—Porque... soy desdichado. No entiendo. No comprendo quien tiene la culpa: si yo, si los genes, si la sociedad… No quise entender que más allá de la enfermedad resiste la felicid… —dije hasta que una mano de mujer me golpeo en la oreja.
Un portazo fue la clave de mi escapada. Me fui. Pero en la puerta me estaba esperando la policía.

Y después de todo, parece no haber ocurrido nada. ¿Será?

 

Creative Commons License
Esta obra está bajo una licencia de Creative Commons
.